Son las 17:11.
Falta una hora y veintisiete minutos para que mi tren salga, de regreso a la capital.
Hora estimada de llegada: 23:49.
Y todo tras tres días de mini vacaciones que conseguí cambiando turnos con una compañera de trabajo y tras 14 días sin vacaciones.
¿Resultado? Un día y medio completamente dormida y otro día y medio preparando el viaje de vuelta.
Molan mis vacaciones, ¿eh?
Menos mal que he conseguido que me presten un ordenador, a cambio de ayudar a un primo cuatro, casi cinco, años menor que yo, a ligar con una chica.
Que pena que resultase que la chica tenía novia. Aunque de esto mi primo no sabe nada...
Confidencias entre bollos...
Sssshhhh, no se lo digáis a nadie, ¿eh?
Escritos empezados hoy: 0
Terminados: 0
No hay comentarios:
Publicar un comentario